Santos Laguna tomó una ligera ventaja en la final de ida del Torneo Apertura al vencer 3-2 al Monterrey, que dejó escapar el empate a cinco minutos del final con un autogol de Duilio Davino.
La gente de la Comarca no podía estar más feliz, pues en los dos últimos encuentros fueron testigos de 11 goles, seis goles de ellos fueron de su equipo.
Previo al encuentro, se especulaba sobre si el Monterrey llegaría a Torreón a poner un auténtico candado defensivo, pero después del silbatazo inicial, los Rayados demostraron que no iban a esperar al rival, sino que también tenían argumentos para poner a temblar a la zaga lagunera.
Sin embargo fue el conjunto de casa el que abrió el marcador con un gol de Iván Estrada, al 23’. La anotación requería una respuesta del Monterrey, que comenzó a apretar al mediocampo lagunero y consiguió el tanto del empate por medio de su mejor jugador, Humberto “Chupete” Suazo, al 37’.
Cuando parecía que el primer tiempo terminaría con un empate, Darwin Quintero, al 41’, se encargó de darle la ventaja al conjunto de casa.
Pero el Monterrey no se iba a quedar con los brazos cruzados, por lo que al minuto 54’ volvió a emparejar el marcador, en un partido de ida y vuelta.
A cinco minutos del final, la suerte le sonrió al conjunto de casa, cuando en un centro al arco del Monterrey, Davino quiso despejar el esférico, pero terminó por introducirla a su propia meta y darle la ventaja al conjunto local.
