En un partido que contó con todo el nerviosismo posible y el vértigo necesario, el equipo capitaneado por Alberto Mancini logró hacer pie en una mañana fría, pero que poco a poco el público se encargó de ponerle calor.
Si bien del otro lado habían dos experimentados doblistas, como Jonas Bjorkman (ex número uno del mundo en la modalidad) y Robert Lindstedt, el corbobés y el bonaerense se las ingeniaron para hacer valer la localí y sacar adelante un partido sin siquiera perder un set.
Para ambos tenistas argentinos, el encuentro tuvo una especie de sabor a revancha, después de que los suecos (con Bjorkman y Johansson) les ganaran en el dobles de la edición anterior, también por los cuartos de final.
Ahora el enfretamiento quedó signado para una emocionante definición en los sigles de este domingo que, de no haber cambios, enfrrentaría a José Acasuso con Thomas Johansson y a Nalbandian con Robin Soderling.
