La selección mexicana Sub-23 está a un paso de sufrir un fracaso histórico y decir adiós a Beijing 2008, tras caer 2-1 ante su similar de Guatemala, en partido correspondiente al Grupo B del Torneo Preolímpico de la Concacaf.
Los goles del triunfo fueron obra de Carlos Villa, al minuto 40, y de Maynor López, al 66. Edgar Castillo había adelantado a México, al minuto ocho, en el duelo que se disputó en el estadio Home Depot Center.
Con este resultado, Guatemala llegó al primer sitio del Grupo B con seis unidades y aseguró su pase a semifinales, mientras que México se quedó con un punto y está obligado a derrotar por una gran diferencia de goles a Haití, o ganar y esperar que Canadá no derrote a los “chapines”.
La selección mexicana sabía muy bien que no podía permitirse otra mala actuación, la cual lo dejaría prácticamente fuera de cualquier posibilidad de acceder a la justa olímpica. Por ello saltó a la cancha con una actitud diferente, dispuesta a luchar hasta lo último todos los balones.
Guatemala facilitó al Tri la posesión del esférico y el manejo de la cancha, al entregar todo el espacio y echarse hacia atrás en busca de superar los primeros minutos, lo cual no consiguió pues el Tri logró irse al frente en el marcador apenas al minuto ocho.
Todo se inició en un pase de primera intención de César Villaluz al área, donde la zaga “chapina” rechazó mal y le dejó el esférico a Edgar Castillo, quien de derecha sacó un disparo raso que dejó sin oportunidad al guardameta Ricardo Jerez.
Esta anotación acentuó el control del conjunto azteca que no le prestaba el esférico a su rival, lo circulaba muy bien por las bandas, por izquierda en la persona de Castillo, sin duda el hombre más desequilibrante, y con Pablo Barrera por el sector contrario.
Los pupilos de Hugo Sánchez pudieron aumentar la ventaja; sin embargo, el síndrome de la falta de contundencia se hizo presente una vez más ahora en los pies de Enrique Esqueda que no aprovechó un excelente pase de Villaluz y mandó su remate a un lado del poste derecho cuando tenía todo para definir, al minuto 25.
Con el transcurso de los minutos, México dejó crecer a su rival, que no desaprovechó una grave desatención de la zaga para lograr la paridad a través de Carlos Villa que le ganó la espalda a sus marcadores para batir a Guillermo Ochoa, al minuto 40.
Esa anotación fue letal para los mexicanos que si bien retomaron la iniciativa de las acciones y la vocación ofensiva, ya no tuvieron el control del balón y los tiempos, ante un cuadro de Guatemala que mantuvo la postura conservadora, pero siendo más inteligente al momento de atacar y poner en aprietos a la zaga con sólo dos hombres.
Conforme la desesperación de México aumentaba, la confianza de Guatemala iba en aumento, sólo esperaba el momento exacto para dar ese golpe que prepararon desde el inicio.
Dicho momento llegó al minuto 66 en otra muestra de la pésima marca de la zaga Tricolor, que dejó rematar al recién ingresado Maynor López, quien con un frentazo sólido batió a Ochoa.
Un minuto después, México pudo cambiar por completo la historia de este partido y probablemente del torneo, pues César Villaluz tuvo en sus pies el tanto del empate; no obstante, sacó un disparo suave que le permitió a Jerez reaccionar y evitar la caída de su marco.
Con el daño ya hecho y con la desesperación reflejada en el rostro, Hugo Sánchez Márquez decidió hacer cambios, ordenó el ingreso de Juan Carlos Silva y Santiago Fernández para tener más hombres al frente y por ahí encontrar el empate.
El otrora llamado “Gigante de la Concacaf” no pudo con sus “fantasmas”, el trabajo colectivo siguió ausente y aunque luchó con coraje y corazón fue incapaz de lograr la igualada; ahora definirá su pase ante Haití, al cual está obligado a derrotar el próximo domingo.
