Guardiola había anunciado que él se "encargaría de que la auditoría de seguridad no afectara al equipo" y visto lo visto en La Rosaleda, lo ha logrado. En un primer tiempo donde el Málaga se ha mostrado muy ordenado y bien posicionado en el centro del campo, el Barcelona ha tenido serios problemas para superar la presión de los de Muñiz. No obstante, después de la lesión de Henry, que fue sustituído por Ibrahimovic a la media hora, el conjunto culé se ha venido arriba. Xavi y Touré empzaban a hacerse con la medular y el Málaga, poco a poco, reculaba. Ibrahimovic, después de una asistencia genial de Messi, abría la lata para los actuales campeones, que se iban al descanso con un 0-1 a su favor.
En la segunda parte, el Barcelona si ha cogido más ritmo y ha gozado de mayor dominio y mejores ocasiones. De esa guisa, Gerard Píqué, que acababa de pisar el campo en sustitución de Chygrynsky, hacía el segundo tanto de los de Guardiola, que dejaba el partido muy encarrilado. Todo se torcía de manera definitiva para el Málaga cuando Albert Luque era expulsado con roja directa y los locales se quedaban con diez hombres. De ahí hasta el final, coser y cantar para los culés.
Con esta nueva victoria, el Barça continúa su racha imparable. Cinco partidos jugados en Liga y cinco victorias en el saco, con un pleno de quince puntos y el liderato del campeonato. Ahora, el Barcelona debe centrarse en la Liga de Campeones, para posteriormente enfilar su choque liguero ante el Xerez.
