El astro Daisuke Matsuzaka encabezó hoy la victoria de Japón 6-0 frente a Cuba, en partido del Grupo 2, en el Clásico Mundial de beisbol.
Matsuzaka, de los Medias Rojas de Boston, se mantuvo en el montículo durante seis entradas, en las que permitió cinco imparables y ponchó a ocho. Aunque no mostró gran velocidad, sus lanzamientos en rompimiento hicieron mucho daño a la batería cubana.
Hace tres años, Matsuzaka venció también a Cuba 10-6 en el partido final del primer Clásico Mundial, disputado en el estadio Petco Park, de la ciudad de San Diego. Igualmente, el estelar pitcher derrotó a los cubanos en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004.
Tras Matsuzaka, el mentor japonés Tatsunori Hara utilizó a los relevistas Hisahi Iwakuma, Takahiro Mahara y Kyuji Fujikawa, que repartieron otros cuatro ponches a los cubanos para un total de 12.
Los asiáticos, actuales campeones, anotaron tres en el tercer capítulo frente al zurdo Aroldis Chapman, quien no se presentó con buen control y tuvo que abandonar el box.
Después los japoneses agregaron a cuentagotas en el cuarto, quinto y novenas entradas, con una producción de 12 indiscutibles, incluido un doble del receptor Keji Johjima.
El ambidestro cubano Frederick Cepeda bateó tres imparables, entre ellos un biangular. También el patrullero central Yoennis Céspedes se apuntó dos sencillos, para convertirse en los más destacados a la ofensiva por Cuba.
Cuba se enfrentará mañana al perdedor entre México y Corea del Sur, al tiempo que Japón lo hará el martes contra el ganador de ese encuentro
